Hogar, idolatrado hogar...

Entra en la sala común aburrido, con su maleta, decide sentarse un rato cerca de la chimenea, antes de ir a su dormitorio. Se desploma en un sillón, suspirando, añoraba la vida muggle.

Llega con un par de maletas, observa su alrededor detallista. Nota solamente a un chico en el sillón luego la sala estaba vacía.

Escucha ruidos, gira su cabeza encontrándose con una chica, al parecer acababa de llegar también. - hola.- saluda simple, algo aburrido. - Razz Prince.- se presenta mientras busca algún tipo de revista o periódico que llegara a interesarle.

- Blair Waldorf. - Me presento directamente, después de él. Fui a sentarme al lado de éste, aburrida. - Que aburrido que está esto. - Suspiré, pensando qué hacer.

- deberían hacer algo para divertirnos.- comenta simple. - hecho de menos la vida muggle, las fiestas... - termina por admitir, mienras ojea una revista, termina por tirarla con repulsión.

- Los tragos.. - Agrega, nostálgica pero esbozando una sonrisa de lado.

Sonríe descarado, riendo levemente. - si, en general todo.- comenta centrando su vista en ella.

- Y eras libre de todoo.. - Suspira. - En fin, ¿Cuántos años tienes? - Pregunta, curiosa y mirándolo

- 17.- contesta simple. - tu?- pregunta señalándola con un pequeño gesto de cabeza, mientras abre su maleta, buscando.

- También. - Contesta, sencilla. Observa la sala desierta. Tenía ganas de regresar al tiempo pasado y revivir esos momentos, donde solo se conocía la palabra diversión.

- sabes, deberíamos igual encargarnos de montar una buena fiesta.- comenta sonriendo. - yo vengo preparado.- explica, terminando de buscar entre sus pertenencias, escondidas dos botellas de alcohol. - no tengo mas, pero sabía desde el principio que tendría que traer de estas.- comenta sacando una, observándola y luego guardándola de nuevo.

- No te creas que no tengo yo también. - Murmuré, animandome. Busqué en mi bolso, y encontré tres botellas de alcohol. Al igual que él. Se las muestra, mordiendose el labio inferior, sonríendo. Las guarda nuevamente.

Ríe. - vaya, parece ser que tenemos ideas similares Blair.- comenta sin dejar de sonreir, guarda las botellas. - te invitaría a un trago si no escaseasen.- bromeó. - es mentira, tengo algunos contactos, la bebida para Razz nunca escasea.- explica. - te apetece una?- pregunta sacando una botella, de nuevo.

Ríe suavemente, divertida. - No sé si soy la única que comparte el mismo gusto que tu, seguramente a los demás les gusta beber , divertirse y si no son así.. Son unos amargados. - Razoné, ampliando la sonrisa. Luego respondí a su pregunta - Encantada, Razz.- Miré la botella y luego a él, sin dejar de sonreír.

- Unos amargados.- subraya, riendo, mientras abre una botella. - el primer trago para las damas.- dice intentando parecer educado, sonriendo de lado.

- Que gentil. - Murmuré, sonríendo de lado. Agarré la botella que me ofreció. - ¿No te molesta si tomo directamente de aquí? - Pregunté, antes de posarmela en los labios.

- es una de mis dotes ocultas eso de la gentileza.- bromea. - claro que no, me da igual.- explica sonriendo de lado.

Mantení mi sonrisa de lado. Posé en mis labios, el pico de la botella. Tomé un buen trago y se la tendí a Razz. - Delicioso es esto. - Comenté ampliando mi sonrisa.

- esperabas algo menos de una botella sacada de mi maleta.- bromea egocéntrico, cogiendo la botella y tomando un trago, se relame los labios.

Ríe levemente. - La verdad que no, ya tenían buena pinta de vista. - Murmuré.

{Mee teengo quee ir, beesoo! }

Sonrie extendiendo la botella a Blair. - gracias.- dice agradecido.

(Oks! Bye!)

Agarré la botella, le di un trago nuevamente. - ¿Salias muy seguido, anteriormente? - Pregunté, siguiendo la conversación.

- continuamente, por eso este sitio me aburre.- explica.

- ¿A quién no? - Bromea. - ¿Quieres hacer algo? Es decir, me refiero a dar una vuelta por el castillo o .. no lo sé algo que nos pueda divertir a ambos.- Propuse, esbozando una ligera sonrisa, amplia.

- claro.- dice asintiendo sonriendo con picardía. - lo que tu quieras...- añade.